Televisión
De la televisión nos seduce lo que tiene de social o gregario y que, no sintiendo la alteridad de quien allí aparece, no representa peligro. Pero, además, queda en suspenso el pensamiento propio –ese pensamiento que tanto malestar nos genera a veces— y el cerebro se pone en bypass. Entonces somos sugestionados, contaminados, abducidos, moldeados, convertidos en rebaño.
Música
Ciertos mecanismos mentales parecen resonar con el ritmo de la música, de tal manera que en ciertas situaciones y ante ciertos hechos, la música concita y pone el clima para que resuenen los apropiados sentimientos. La misma escritura no deja de ser un proceso musical.
Creencias y grupo
Las convicciones personales acerca de un asunto social o político se niegan si no concuerdan con las del grupo que nos acoge y cobija. Nos adaptamos a las creencias grupales mediante la fuerza que ejercen sobre nosotros los afectos. El poder de convicción de un líder y el abrigo que recibimos de un grupo hace tambalear nuestras más sólidas verdades. Incluso, una idea sin argumentos puede fraguar en cimentada creencia por la simple verosimilitud que le proporciona el eco colectivo.
Belleza y evolución
La belleza es un ardid evolutivo para que el organismo reconozca lo que le es conveniente para un apareamiento productivo, esto es, para lograr eficacia biológica. Aunque bien es cierto que a ese ardid se superpone este otro: parte de nuestras preferencias en la materia sexual son correlativas a los primeros estímulos que recibimos.
Las Formas o Ideas de que hablaba Platón se corresponden con las diferentes categorías que mentalmente formamos de las cosas; pero estas categorías se establecen mediante la experiencia de lo real, a modo de promedio de lo que se experimenta. Así, la belleza ideal de un rostro coincide con el promedio de los rostros que hemos visto.
Si seguimos haciendo catas en los sustratos de lo bello, una mujer atractiva arrastra la mirada de los hombres como arrastra un torbellino la hojarasca.
Adagios
La vida es un asunto mortalmente serio.
La cuestión espinosa puede presentar tales arrecifes y tales ciénagas, que resulta muy fácil embarrancar argumentalmente en ellos.
El impulso sexual vertebra nuestra existencia tiránicamente.
Los resentimientos se agavillan mediante una creencia, y los símbolos se convierten en señas de identidad.
La aspiración por excelencia de los españoles de una gran parte de España es a tener cortijo, esto es, a actuar como un rentista, ¡o bien a ser funcionario!.
Profilaxis contra el deseo inalcanzable: ignóralo, evita que arraigue, desprécialo.
¡Qué impermeable resulta el oído para aquello que no se quiere escuchar!
¡Cuánto tiempo requirió la intelectualidad de Occidente para «sentir» la miseria que se escondía en el Este!
El clamor de la igualdad y el amor universal significa para el organismo: necesito que me amen y evitar que nadie se encuentre por encima de mí.
En cuanto al «amor universal», podemos añadir: basta que haya escasez, basta que dos deseen lo mismo, basta que surja disputa para que surja el odio y la crueldad y el enemigo. ¡Como si quisieran abolir la naturaleza humana por decreto!, ¡pronto encontrarán un chip para ello!
URSS
Violencia proletaria. Paraíso socialista. Tejido de opresión de media Europa urdido con el hilo del miedo y la aguja del comunismo. Miseria humana. Cárcel inmensa. Esclavitud ideológica. Oscurantismo, Gulags y ejecuciones en masa. El alcoholismo como remedio. La mentira como estandarte. Gran Hermano. La maldita y miserable intelectualidad francesa, española, italiana, portuguesa…, alabando con denuedo tal campo de concentración. Miserable Sartre, miserable Pasionaria, Carrillo, Foucault, Gramsci, Georg Lukács…El corazón de las tinieblas; la médula del terror: el comunismo en la URSS.
Ni más ni menos. Añadir un par de frases no aportaría nada a tus argumentos.
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Gracias
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