¿Calentamiento Global o el mayor fraude y engaño cometido desde que los mesopotámicos inventaron los dioses antropomorfos?

Aviso para navegantes: Para quienes el tema les resulte candente, notifico que en este mismo blog existen las siguientes entradas que versan sobre el cambio climático.

El retorno del dogmatismo

Fake News. Cambio climático

La Iglesia del cambio climático I

La Iglesia del cambio climático II

Se pueden encontrar con el buscador del lateral, abajo.

 ¿Existen pruebas del supuesto cambio climático antropogénico?

A tal pregunta se le podrían añadir estas otras dos: ¿Existen motivos para la alarma?, e incluso, ¿Existe tal cambio climático o es históricamente relevante?

Claramente, no existen pruebas. No ha sido presentada prueba científica alguna de que tal cambio sea debido a la mano del hombre.  Uno puede exprimirse la sesera buscando pruebas fehacientes del hecho, que no las encontrará. Uno puede analizar las razones, los estudios, los argumentos…, la evidencia brilla por su ausencia. Uno puede comprobar si se han cumplido los pronósticos realizados por los popes antiguos o modernos de ese Panel del Cambio Climático. Ninguna previsión se ha cumplido, ni de lejos.

¿Qué razones presenta la Iglesia del Cambio Climático para que su “verdad” sea considerada un dogma?

1.-Afirma que existe una correlación entre el nivel de CO2 en la atmósfera y la temperatura del planeta; por consiguiente, la desmesurada quema de combustibles fósiles que tiene lugar en el mundo es quien causa el aumento de temperatura.

2.-Afirma que existe un consenso científico de que el aumento de temperatura es antropogénico.

3.-Que las sequías que tienen lugar en determinadas partes del planeta, las lluvias torrenciales, las inundaciones, los huracanes, el derretimiento de los glaciares, el calentamiento de los mares…, son signos evidentes del calentamiento global.

4.-  Que las temperaturas en los años 2014, 2015, 1998, 2005, 2003, 1998, 2005, 2003, han sido las más elevadas de los últimos cien años.

5.-Que los modelos matemáticos de los investigadores predicen un aumento continuado de las temperaturas de seguir el ritmo de emisión de gases-invernadero a la atmósfera.

6.-Que el calentamiento es ahora más acelerado que  lo ha sido nunca.

Dado que el denominado Calentamiento Global antropogénico está siendo utilizado de coartada y excusa para llevar las sociedades por derroteros que con el paso de los días se están revelando más y más distópicos, bueno será que echemos un vistazo a su consistencia científica. Nos toca analizar tales razones para ver si constituyen pruebas veraces de la existencia del fenómeno.

Factores climáticos y hechos

Concedamos gratuitamente que la cantidad de CO2 en la atmósfera sea uno de los factores que intervienen en la temperatura del planeta debido a que ejerce sobre el planeta un efecto invernadero[1].

Pero existen otros factores[2] que también son muy influyentes, entre otros: el brillo solar; las manchas solares; la orientación del eje de giro terrestre respecto al Sol; la cantidad de metano en la atmósfera; las nubes; algunos compuestos azufrados procedentes de la actividad volcánica u oceánica; la actividad volcánica[3]; la temperatura del Océano[4]; el magnetismo terrestre[5]…La influencia de cada uno de los factores expuestos sobre los demás es un problema de realimentación mutua de cálculo imposible[6].

Un problema de mucha más sencilla resolución que el clima del futuro es el de hallar las razones de las fluctuaciones térmicas ocurridas en el planeta durante los últimos 150 años en que se tienen registros; sin embargo, las razones que se dan son dispares, desatinadas u opuestas, cuando no pretenden ser un fraude[7]. Tampoco el cálculo de averiguar de un día para otro la previsión atmosférica de temperaturas y precipitaciones tiene soluciones fiables si la previsión es para una semana.

Prácticamente todos los modelos de previsión climática realizados desde los años 80 del pasado siglo han resultado errados por exceso[8] (lo cual resulta sospechoso). Recordemos que el ex Secretario de Estado norteamericano y hoy Embajador Especial del Cambio Climático, John Kerry, predijo en 2009 que para 2014 se habrían derretido los casquetes polares, sin embargo, el de la Antártida ha aumentado y el del Ártico sigue ahí siete años después de la imaginada apocalipsis. Recordemos también aquella otra apocalipsis prometida por Al Gore en el documental Una verdad incómoda, con todas las ciudades del mundo desapareciendo.

Los investigadores del Cambio Climático, que toman como axioma una correlación entre la cantidad de CO2 en la atmósfera y la temperatura media del planeta, tampoco son capaces de aportar razones fehacientes al hecho de que desde 1950 a 1975, en la que se dio un consumo creciente de combustibles fósiles y de CO2 y, sin embargo, la temperatura media disminuyó.

Otro hecho pone en cuestión esa correlación entre el CO2 y temperatura terrestre es el descubierto al analizar los hielos acumulados durante miles de años en Groenlandia. Se observa una correlación pero invertida temporalmente: primeramente se produce un aumento de la temperatura y alrededor de 800 años después se produce el aumento de CO2, es decir, muestra una inversión de causa-efecto en relación a lo que nos dicen.

También se ha de recalcar que la inmensa mayoría de los datos térmicos se toman en el hemisferio norte, mientras que son escasos en el hemisferio sur. Instalados en pleno campo en el siglo XVIII muchos observatorios se encuentran ahora en zona urbana más caliente así que los errores pueden ser del orden de magnitud del calentamiento anunciado.

Otra sombra de sospecha: en 1979 se lanzaron los primeros satélites para la medición de la temperatura en la troposfera. Hasta 1998 sus datos ofrecían aumentos de temperatura año a año y el IPCC los pregonó como infalibles previsores del apocalipsis climático. Desde esa última fecha, sin embargo, las temperaturas que proporcionan no han variado significativamente, así que lo que tiene validez ahora –según la IPCC—es la temperatura tomada en la superficie del planeta[9].

 De mentiras y escándalos

Sobre las temperaturas de superficie planea la sombra del Climategate[10], un escándalo así llamado por sus similitudes con el escándalo  Watergate, que llevó a la dimisión del ex presidente norteamericano Richard Nixon. El asunto fue que varios hackers destaparon en noviembre de 2009 cientos de emails  de investigadores del Cambio Climático en que estos se conjuraban para ajustar  gráficos y  datos, o para eludir la entrega de datos que pusieran en duda la gravedad de tal cambio, o para tratar de impedir que científicos críticos pudieran publicar en revistas científicas. En el centro de la conjura estaba el Climatic Research Unit (CRU), de la Universidad de East Anglia, con su director Phil Jones, que tuvo que dimitir. La maniobras para crear alarmismo y recibir a cambio sustanciosos recursos para la investigación, parece ser una labor no muy rara. El mismo Phil Jones ha sido también acusado de fraude científico por ocultar datos sobre el efecto de las ciudades en el aumento de temperatura.

Volviendo a Al Gore y su Una verdad incómoda, resulta que su gurú climático fue el profesor Michael Mann, de la Universidad Estatal de Kent y famoso por su “diagrama del palo de hockey[11]” en relación al Cambio Climático. Bien, el Dr. Timothy Francis Ball, antiguo profesor en el Departamento de Geografía de la Universidad de Winnipeg en Canadá dijo que una entrevista que la IPCC, desde su creación, venía manipulando los datos climáticos para llegar a los resultados deseados, y en el saco de la manipulación metía el “palo de hockey” de Michael Mann. La respuesta de Mann[12] fue una demanda por difamación y calumnias. La demanda, con varios millones de dólares en litigio se inició en 2011 y llegó hasta la Corte Suprema de la Columbia Británica. La corte pidió a Michael Mann que mostrase su investigación científica, pero éste se negó (extraña forma de defender su “verdad incómoda”, el Pan Nuestro del Cambio Climático), lo que le costó perder el juicio y tener que pagar una buena suma de dinero[13]. El Tribunal concluyó con que los datos del “palo de hockey” habían sido manipulados y falsificados. Ahora bien, a Al Gore “el palo de hockey” le fue estupendamente. Yendo con su yet privado de aquí para allá cobrando una tarifa de 70.000 euros por conferencia, paso de declarar a la Hacienda Norteamericana 700.000 dólares en el año 2000, a 172,5 millones[14] en el año 2015.


[1] Es el fenómeno por el que los gases de la atmósfera impiden que los rayos solares reflejados por el suelo escapen, por lo que la superficie terrestre se calienta en exceso como lo hace un invernadero agrícola debido al plástico que lo cubre.

[2]  Videos del climatólogo  Richard Lindzen, del MIT

[3] El 15 de enero de 2022, un volcán submarino en Tonga emitió 146.000 millones de litros de agua a la atmósfera, esto es, un 10% del vapor de agua que contiene la estratosfera. Resulta que el agua, que sí es un gas que absorbe y retiene la radiación solar, sí es causante de efecto invernadero, así que se estima que el aumento de vapor de agua en la atmósfera producido por el volcán podría sobrecalentar la Tierra durante al menos cinco años. Sin embargo, la erupción volcánica del Krakatoa, Indonesia, en 1883, que lanzó cenizas compuestas mayormente de azufre y CO2 produjo un descenso de la temperatura terrestre durante dos años.

[4] Las corrientes marinas denominadas NAO (North Atlantic Oscillation, que gobierna el régimen de vientos del oeste sobre Europa y el este del océano atlántico) y Niño determinan en gran medida el clima de buena parte del hemisferio norte, sin que se tenga certeza del modo en que están influidos por los factores mentados.

[5] El Polo Norte magnético se está desplazando hacia Rusia desde los años 90 con una velocidad máxima de 60 km por año. El magnetismo terrestre es responsable de desviar el viento solar e impedir que colisione con los iones de la atmósfera. Así que un cambio de orientación del eje magnético puede que tenga influencia no despreciable en el calentamiento o enfriamiento del planeta.

[6] Piénsese en que un problema infinitamente más sencillo como es el de la dinámica de tres cuerpos sometidos a fuerzas gravitatorias entre ellos se resiste a encontrar una ecuación que lo rija. En el caso que nos ocupa, se desconoce cómo unos factores influyen en los otros y a la velocidad con que lo hacen.

[7] Se acusa a la IPCC de que todas sus previsiones están basadas en modelos matemáticos cuyos resultados dependen de ciertos parámetros que ajustan a conveniencia del resultado que quieren obtener.

[8] https://youtu.be/4JJ3yeiNjf4 Dr. Willie Soon

  https://youtu.be/c-8Nws5wfG0  Dr. Roy W. Spencer, Universidad de Alabama Discrepancias entre modelos y observaciones del calentamiento.

[9] Si se tratase de un calentamiento invernadero habría más temperatura en mitad de la troposfera, en los 10 km de la atmósfera, que en la superficie. El efecto invernadero retendría el calor en la troposfera según los modelos climáticos. el físico del clima Frederic Singer contra el calentamiento y contra el negocio del clima Exdirector del instituto de meteorología de EEUU,profesor emérito de Ciencia ambiental de la Universidad de Virginia:  No hay aumento de temperatura en la troposfera, contra lo que aseguran los modelos climáticos que se utilizan. Ni los satélites ni los globos sonda lo han detectado. Las hipótesis del efecto invernadero no se cumplen

[10] https://www.aorillasdelpotomac.com/escandalo-climategate-reino-unido/

[11] El diagrama del palo de hockey aseguraba que las temperaturas habían permanecido bastante inamovibles durante los últimos mil años, y que al llegar el siglo XX la temperatura media sufrió un súbito aumento. El resultado se asemejaría a un palo de hockey en posición horizontal.

[12] https://disidentia.com/michael-mann-y-nature-ideologia-religion-o-ciencia/

[13] https://www.libertaddigital.com/ciencia/el-creador-del-palo-de-hockey-reconoce-que-la-ciencia-en-que-se-baso-es-incierta-1276396460/

[14]https://www.facebook.com/JavimaMaldonat/posts/al-gore-gano-casi-200-millones-de-dolares-con-la-estafa-del-calentamiento-global/2534889573257239/

https://economicament.net/281/al-gore-realmente-se-esta-beneficiando-de-su-defensa-del-cambio-climatico-a-traves-de-programas-de-comercio-de-carbono-o-son-mas-noticias-falsas-de-derecha

YA SOMOS ZORROS DOMESTICADOS

Primeramente, quisieron cambiar el lenguaje común diciendo defender con ello a marginados colectivos minoritarios, y algunos académicos de la lengua mostraron su desacuerdo, pero a la mayoría no nos importó mucho.

Cuando impusieron la ideología de género pensamos que era cosa de locos, pero biólogos y médicos guardamos silencio.

Luego nos inculcaron la creencia en una religión climática y una gran cantidad de meteorólogos encontraron buenos trabajos, así que callaron; nosotros, los ciudadanos, por ignorancia o por miedo, también callamos, aunque remugando por los adentros.

Más adelante quitaron a los padres la patria potestad sobre sus hijos, y quienes tenemos hijos apenas nos atrevimos a levantar la voz.

Entonces pusieron barrotes insalvables entre hombres y mujeres, y seguimos callados porque nos amenazaron con leyes insidiosas.

Cuando prohibieron los desfiles de animales y la caza y las corridas de toros fueron perseguidas, también callamos porque no nosotros no éramos aficionados a esos actos.

Quisieron entonces prohibir la ingesta de carne y los coches de gasoil y gasolina porque—dijeron—contaminaban mucho, y callamos porque no era urgente y avisaron con tiempo.

Nos encerraron durante meses “por nuestro bien”, con la excusa de la pandemia y llegamos a pensar que eran lunáticos los que se negaban a ello.

Vino entonces lo inaudito, pues quisieron eliminar o cambiar la historia mediante leyes, y los historiadores no pudieron levantarse con el peso de la ley sobre sus espaldas; a los demás, no se nos oyó mucho.

Peor aún fue cuando declararon su verdad como la verdad absoluta, a la que todos debíamos subordinarnos, y el miedo a ser denunciados por contravenir tales verdades nos mantuvo en silencio.

Entonces subieron desmesuradamente los impuestos y dieron sueldos grandiosos a sus amigos y los colocaron en puestos relevantes de la administración, y como los políticos de la oposición se expresaron poco, a nosotros, ya para entonces, apenas nos salió una queja.

Dejaron que jóvenes sin intención de trabajar ocuparan las viviendas aprovechando la ausencia de los dueños, y lo hicieron como ensayo para lo que vendría después: la eliminación de la propiedad privada, pero entonces ya no nos quedaba un mínimo resuello para poder hablar.

Nos dimos cuenta entonces que todos caminábamos con la cerviz gacha, como llevan gachas sus orejas los zorros domesticados. Ya no había nada que hacer, los barrotes de la prisión nos cercaban y el cerrojo estaba echado.

Sin embargo, ¡albricias!, muchos jóvenes, ya totalmente domesticados, han dejado de probar la carne porque han sido acostumbrados a tomar un edulcorado biberón. Tampoco precisan coches porque se sienten felices viajando en grupo dentro de un vagón. No tienen propiedades, pero el Estado les provee de un vale con el que pueden pagar en alquiler su habitación comunal, su participación en las redes sociales, e incluso pueden tomar un taxi de cuando en cuando. Algunos, más avanzados, han prescindido totalmente del dinero, de la propiedad y de comer carne, y dicen vivir felices en enjambres comunitarios donde no tienen un solo momento para aburrirse.

La historia, el clima, la verdad, las creencias que han de tener, la identidad sexual, les son anunciados y dados por los Medios cada mañana al levantarse. El concepto de libertad ha dejado de existir para ellos por innecesario. Se han convertido en “zorros” totalmente domesticados. Como dijo la política danesa en el foro de Davos, “No tendrán nada y serán felices”. Bueno, eso sí, tendrán su conexión a Internet. Se habrá llegado al Mundo Feliz que escribió Aldoux Huxley, pero vigilados en todo momento por la atenta mirada del Gran Hermano que nos describe Orwell en 1984. Luego empezará a rodar la Agenda 2030-2050

LA IGLESIA DEL CAMBIO CLIMÁTICO II

Orígenes, paisajes y dinámica[1]

En 1973 los principales países productores de petróleo contrajeron sus ventas y los precios se dispararon. Había estallado la crisis del petróleo. En España, pero de manera parecida en todo Occidente, los medios de comunicación, guiados de la mano de Dios o del diablo, porque se dieron cuenta del negocio encerrado en el alarmismo o por intereses inconfesables, comenzaron a lanzar noticias apocalípticas: que en el subsuelo quedaban reservas de petróleo para diez años; que algunas zonas del planeta, como el sur de España se convertirían en desiertos en el periodo máximo de diez años (el número diez parecía ser un número mágico y un mantra repetido hasta la saciedad). Ni una cosa ni otra resultaron ser ciertas ni por asomo. ¡Quién duda de que tras la noticia estaban los intereses de las centrales nucleares! El movimiento ecologista brotó en aquellas fechas con fuerza. En 1971, en Canadá se creó Greenpeace y pocos años más adelante sus delegaciones se extendían por medio mundo. El ataque contra la deforestación empezó siendo uno de los temas preferidos del ecologismo.

 Ecologismo, marxismo e IPCC

Pero en la década de los setenta casi todos los dedicados a la meteorología pensaban que el planeta se dirigía hacia un periodo de enfriamiento, lo que resultaba muy preocupante debido a las implicaciones económicas y sociales que tal hecho conllevaría. Sin embargo, a finales de la década la temperatura media del planeta empezó a subir y el peligro pareció conjurado. En esas, un meteorólogo sueco , Bert Bolin, dio entonces con la ocurrencia de que el CO2 (que estaba en la atmósfera en una proporción de 300 partes por millón) procedente de la quema de combustibles fósiles, podía ser la causa del calentamiento al crear un efecto invernadero en la atmósfera, que calentaría la superficie terrestre.

La ocurrencia era una noticia excelente para los grupos ecologistas y para los lobbies de la energía nuclear. Si no queremos que la superficie del planeta se convierta en un desierto, deja de producir CO2, decían los primeros; la energía eléctrica procedente de las centrales nucleares no contamina el medioambiente con el dióxido de carbono, decían los segundos. Margaret Thatcher, en su guerra particular contra la minería del carbón en el Reino Unido y a favor de la energía nuclear, financió estudios para investigar lo nocivo para la atmósfera de la quema del carbón. La política había comenzado a poner sus garras en los asuntos de la Ciencia.

Los augurios a favor de las centrales nucleares parecían esperanzadores. En 1985 acaba la huelga minera y la señora Thatcher aparece como clara vencedora, pero aquel fatídico año fue el de la explosión y vertido a la atmósfera de material radioactivo en la central nuclear de Chernóbil, y la opción nuclear pierde fuelle rápidamente, mientras que la opción ecologista de energías renovables y menor consumo sale reforzada. Además, dos asuntos relacionados cobran por esas fechas gran relevancia. Por un lado, el posmodernismo estaba ya bien enraizado en los departamentos o facultades de filosofía, psicología, sociología y pedagogía de las universidades europeas y estadounidenses. Recuérdese que la gran mayoría de sus principales integrantes pertenecen a la izquierda radical y que expanden por los campus el relativismo moral y cultural, promoviendo con los otros grupos que ya han sido previamente señalados lo que denomino la Santa Alianza. Por otro lado, el marxismo clásico está desengañado con las condiciones económicas y sociales desarrolladas en la URSS y en sus países satélites, así que poco a poco van abrazando el posmodernismo y el ecologismo radical como estrategia para acabar con el monstruo de tantas cabezas que es la liberal democracia capitalista.

Si el enemigo está bien dibujado, los objetivos primeros pasan a ser acabar con las emisiones de CO2 y con la lluvia ácida. En 1988 y también dirigido por Bert Bolin, se crea el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC). Un año después, el 9 de noviembre de 1989, cae el Muro de Berlín y rápidamente se desintegran los regímenes comunistas de Europa. Un duro golpe ideológico para la izquierda europea marxista; pero las creencias marxistas se enraízan en la conciencia con odio y resentimiento, así que ni una derrota ideológica tan enorme es capaz de arrancarlas. El resultado fue que se modificó la apariencia ideológica para mantener a salvo las esencias, y las huestes marxistas más tenaces se enrolaron en el ecologismo de la mano del posmodernismo, creando junto a otros grupos la Iglesia del progresismo que hoy soporta Occidente, con sus dogmas sobre el Cambio Climático, su Corrección Política, su propósito de «salvar al planeta», su neolenguaje, etc. etc. El ecologismo iba a ser ahora la máscara de muchos de los antiguos marxistas «duros».


[1] https://youtu.be/0sCgTl3LctU Es éste un magnífico video titulado “El gran timo del cambio climático”. A eso se refieren entre otros los científicos: Philip Stott, del Departamento d3e Biogeografía de la Universidad de Londres; Patrick Moore, cofundador de Greenpeace; Niger Calder, autor de The chilling stars; Ian Clark, Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Ottawa; Roy Spencer, premio especial NASA; John Christy, del IPCC; profesor Akasoku, investigador del clima en Alasca; Patrick Michaels, Departamento de Ciencias del Medio Ambiente de la Universidad de Virginia; Paul Driessen, militante ecologista y autor de Green Power, Black Death…Timothy Francis Ball (5 de noviembre de 1938) es un geógrafoclimatólogo británicocanadiense y profesor ordinario de Geografía en la Universidad de Winnipeg; Richard Siegmund Lindzen (nacido el 8 de febrero de 1940) es un físico norteamericano estudioso de la atmóstfera, conocido por su trabajo sobre la dinámica de la atmósfera intermedia, las mareas atmosféricas y la fotoquímica del ozono; (John Raymond Christy es un climatólogo estadounidense de la Universidad de Alabama en Huntsville (UAH) cuya área de trabajo es la teledetección a través de satélite del clima global y el cambio climático global. Es más conocido, junto con Roy Spencer, por el desarrollo del primer registro de temperatura por satélite exitoso del mundo; el físico del clima Frederic Singer contra el calentamiento y contra el negocio del clima Exdirector del instituto de meteorología de EEUU; Paul Reiter, profesor en el Instituto Pasteur de París

LA IGLESIA DEL CAMBIO CLIMÁTICO I

Que el llamado Cambio Climático antropogénico es “una verdad como un templo”, es el dogma que los medios, las universidades, los científicos y los políticos de todo el mundo consideran santo y firme. No solo se anuncia como una verdad inamovible sino que se exige que no haya discrepantes; y se exige con la virulencia inquisidora con que se exigía en los tiempos pretéritos del dogmatismo eclesiástico. Hoy en día negar el Calentamiento Global está tan perseguido en los ambientes universitarios y científicos como lo estuvo en su día negar el holocausto judío. Se me ocurren algunas similitudes al respecto.

En 1212, cerca de 20.000 niños siguen a quien dice haber recibido de Jesucristo el mandato de liberar Jerusalén. Esperan que, milagrosamente, el Mediterráneo se abra a su paso. Más de la mitad mueren de hambre en el camino, otros desertan; unos dos mil embarcan en Cerdeña, y en Alejandría son vendidos como esclavos a los serrallos sarracenos. Tal horrendo despropósito es conocido como la “Cruzada de los niños”.

Tras la cumbre del clima que tuvo lugar en Madrid del 2 al 15 de diciembre de 2019, miles de niños desfilan por las calles de muchas ciudades europeas clamando contra la iniquidad del capitalismo, que está envenenando el aire y el planeta y que nos está conduciendo a una catástrofe sin igual en la historia de la humanidad. La lideresa de las movilizaciones es la niña de 16 años Greta Thunberg, que pregona en la asamblea de la ONU que le han robado sus sueños y su infancia, y que no puede soportar más el sufrimiento y el miedo por el dolor del planeta, y sigue diciendo que los jóvenes están empezando a entender la traición de que son objeto. Es toda una Cruzada para liberar al planeta del cambio climático causado por las emisiones de CO2. Una parroquia luterana sueca proclamó que Jesucristo había nombrado a Greta Thunberg  su sucesora. La Iglesia del Clima ya tiene su gran profeta y su gran sacerdotisa.

Nos horroriza el que en 1633 Galileo fuese forzado a presentarse delante del Santo Oficio de la Inquisición para retractarse de su apoyo a la teoría heliocéntrica o copernicana. Galileo hubo de abjurar de sus afirmaciones científicas, siendo confinado en su casa durante los cinco años siguientes. Sin embargo, se aplaude en todos los ámbitos que la Inquisición de la Iglesia del Cambio Climático procese a cuantos galileos le salen al paso.

Peter Ridd es físico y era profesor de la Universidad James Cook en Australia hasta que lo expulsaron por contradecir el dogma de que los arrecifes de corales estuvieran muriendo debido al Cambio Climático[1]. A Patrick Moore, ex presidente y cofundador de Greenpeace no le han perdonado que dijera: “El Cambio Climático es una de las mayores estafas de la historia”; tampoco a John Coleman, creador de Weather Channel, también disidente y que elevó el grado de fraude del Cambio Climático al mayor jamás habido. Otras amenazas y alarmismos son aún más preocupantes: el senador demócrata estadounidense Sheldon Whitehouse declara: “Cualquiera que se atreva a negar el Calentamiento Global debería ser enjuiciado y encarcelado”. Todo científico que se atreva a negar el Cambio Climático está condenado al ostracismo[2]. El totalitarismo de esta nueva Iglesia se asemeja también al totalitarismo soviético.

En Febrero de 1935, Trofim Denisovich Lysenko, un oscuro biólogo, ataca a los genetistas soviéticos porque “con sus teorías importadas de Occidente están destruyendo la agricultura soviética”, palabras que impactaron en Stalin. Haciendo uso del engaño de conseguir una nueva biología dialéctica y comunista, consiguió llegar a ser presidente de la Academia Nacional de Ciencias Agrícolas, y, durante tres décadas controló las investigaciones biológicas y la agricultura, llevando a un desastre tras otro;  ordenó la destrucción de todos los libros basados en genética mendeliana y llevó a cabo una sangrienta purga de científicos. El conocimiento de la biología desapareció en la URSS, pero ninguna evidencia en contra podía hacer frente al fervor ideológico de quien alegaba que: “La teoría mendeliana de la herencia es falsa por ser reaccionaria y metafísica, y niega los principios fundamentales del materialismo dialéctico”.

El poder de la Iglesia del Cambio Climático para imponer un dogma, para coaccionar  al disidente –o al que simplemente duda—y para condenarlo al ostracismo, es gigantesco. . Esta Iglesia no tiene nada que envidiar a la que condenó a Galileo, o a la que instituyó Lysenko en la URSS. Ttrata de fanatizar a los jóvenes y hacerles acatar el dogma del clima, cuyas oscuras pretensiones se ocultan. Se trata de una represión de las libertades de magnitud global, una Inquisición mundial en toda regla dirigida y manejada por la ONU, y que no tiene nada que envidiar al Santo Oficio en su acción represora El dogmatismo ha vuelto con fuerza y con la intención de acabar con libertades y debates. La nueva Iglesia del cambio climático se ha instituido. Con la ONU haciendo las veces del Papa y el Intergovermental Panel on Climate Change (IPCC) haciendo de Santo Oficio de la Inquisición. También hoy en día los juegos de poder, los intereses económicos y los fanatismos ideológicos, son los principales factores  para que se haya desatado esta Cruzada contra el Cambio Climático. El CO2 no pasa de ser un mero símbolo.

En la imposición de ese dogma trabajan actores muy diversos: El secretario norteamericano de Estado con Obama John F. Kerry, fue uno de los primeros alarmistas, ya nos amenazaba alarmantemente con estas palabras: “Los científicos suponen que el Ártico va a estar libre de hielo en 2013”. La revista Science, entregada, como Nature, a la alarma en cuanto al cambio climático, pregonó que “El presupuesto necesario para el clima es más importante que la Democracia”. Hoy en día la ONU y su Secretario General António Guterres, llevan la batuta en la orquestación de amenazar y atemorizar a la población de Occidente. Pero otros no se contentan con alarmar y crear miedo injustificado en la población, sino que reprimen sin compasión al hereje.

Tras varios siglos de lucha contra el dogma eclesiástico y de avance de la razón en el estudio de los asuntos del mundo, hoy en día el dogma y la irracionalidad han vuelto al panorama social con más fuerza que nunca. Sin entrar ahora en la verdad o en el fraude que  encierra esa espiral de locura y dogmatismo, esa nueva religión llamada Cambio Climático,  el hecho evidente es que, tal como ocurrió con Galileo, tal como hizo el comunismo de la URSS de la mano de Lysenko, los defensores de la existencia del Cambio Climático tratan por todos los medios a su alcance de impedir la libertad de expresión a todo discrepante y lanzan amenazas contra todo aquel que se aparte del dogma del clima, a la vez que ejercen represalias contra cualquier científico que no esté de acuerdo. Es una lucha religiosa que condena al ostracismo al científico heterodoxo, que impide el debate y la circulación de ideas, y que es una brutal amenaza contra el progreso, la libertad y los derechos. ¿Para qué necesita una Iglesia un dogma si puede presentar pruebas de la verdad[3]?

CONTINUARÁ…


[1] [1] https://es.theepochtimes.com/profesor-esceptico-sobre-cambio-climatico-recibe-usd-800-000-luego-de-que-universidad-lo-despidiera_524455.html   https://plazamoyua.com/2018/05/19/el-caso-del-profesor-peter-ridd-y-el-cuento-del-coral/

[2] https://youtu.be/wYlUrj4Ngpc Este video contiene una sesión del Senado de los EEUU en la que varios senadores y varios científicos hablan del Cambio Climático y las implicaciones políticas, sociales y económicas que está teniendo

[3] El Premio Nobel de Física 2021 fue entregado a tres investigadores por formular un modelo matemático por «sus contribuciones para entender sistemas complejos como el clima en la Tierra. Pero no pasa de ser un modelo matemático que carece del requisito de la demostración empírica, tan necesaria en la investigación científica. Por primera vez en la historia se ha entregado el galardón del Nobel de Física sin evidencias empíricas.

¿Cambio climático?… Desde luego

0. El clima cambió en El Sahara hace 7000 años y el vergel se transformó en desierto. https://www.investigacionyciencia.es/noticias/cmo-se-desertific-el-shara-15954

1.-En una tablilla de arcilla de hace 2.700 años, el astrólogo y sacerdote Akkulanu escribía al rey asirio Asurbanipal sobre los años de sequía que venían sufriendo: «En cuanto a las escasas lluvias de este año y que no hubiera cosecha, es un buen augurio para la vida y bienestar del rey mi señor». Pero la sequía acabó durando 60 años y fue decisiva para que la ciudad de Nínive y con ella todo el Imperio neoasirio colapsaran en el 612 antes de esta era. Y no fue la primera gran civilización que cayó ante los vaivenes del clima, ni la última.

2.-Más al sur de Nínive y dos milenios antes, floreció en la baja Mesopotamia el Imperio acadio, iniciado por Sargón I de Acad. Ahora, un análisis de corales fosilizados en el actual golfo Pérsico muestra que hace 4.100 años el patrón de los vientos cambió y el temido shamal, el viento del norte, se hizo tan persistente que las tormentas de arena y la falta de lluvias debieron de arruinar las cosechas año tras año.

3.-También fue un cambio en el ciclo del monzón lo que pudo empujar a los habitantes de Harappa (en el actual Punjab) y otras ciudades de la cultura del valle del Indo a abandonarlas y refugiarse en las laderas de las montañas. https://elpais.com/elpais/2019/12/09/ciencia/1575875145_996776.html

4.-Y cada vez hay más evidencias de que la sequía tuvo mucho que ver en el colapso de la civilización maya

5.-En el reverso de la moneda climática, el del frío, recientes investigaciones señalan que una miniedad de hielo entre los siglos V y VII, en la que la temperatura media bajó en cuatro grados, impactó en el curso de la historia al inicio de la Edad Media. El clima, en este caso el enfriamiento global, tuvo mucho que ver incluso con el fin del Imperio romano. Al menos esa es la tesis que mantiene el científico e historiador Kyle Harper en su obra El fatal destino de Roma (Editorial Crítica), publicada este año. https://elpais.com/elpais/2016/02/08/ciencia/1454942821_371470.html

7.-Centroeuropa:En el siglo IX los cronistas carolingios subrayan la crudeza de los inviernos. A partir del siglo XII empiezan los inviernos suaves y una crónica de Lieja describe el descubrimiento de fresas maduras en Navidad de 1116. Durante los decenios más fríos de la pequeña era glacial (1620-1629 y 1690-1699) la T de abril a setiembre era medio grado inferior a la actual.

Higueras hasta en Colonia. Siglo XIII de aumento de T y de prosperidad. De pronto cayeron hacia 1300.

Europa entre 1530 y 1565 veranos cálidos y secos. A partir de 1570 fríos y húmedos.

6.-Un periodo cálido entre el 900 y el 1300 (pequeño óptimo) en el que los vikingos se establecieron en Groenlandia y se cultivó la viña en Inglaterra y Escocia.

7.- Una pequeña era glacial de 1550 a 1850 en la que los glaciales alpinos avanzaron mil metros.

7. Durante la Guerra de los cien años*, las lluvias eran tan frecuentes que pudrían las raíces de las plantas, lo que provocó una hambruna descomunal.

*fue un conflicto armado entre los reinos de Francia e Inglaterra que duró 116 años (24 de mayo de 133719 de octubre de 1453)

8.-Hambrunas en Escocia y Francia al final del siglo XVII provocadas por sucesivas olas de frío. El decenio 1729-1738 fue en Inglaterra  muy caluroso. De 1691-1700 a 1729-1738, la T se elevó 1,79º en apenas 13 años, un aumento mucho más rápido que el actual.

9.-La pequeña edad glacial (siglos XVII-XIX) es sin duda una oscilación Dansgaar-Oeschger. Quizás también el enfriamiento de hace 8.200 años (con una duración de unos 200 años)

10.-Desde hace 10.000 años vivimos en un periodo interglacial, el holoceno. Hace 6000 años los casquetes glaciales habían desaparecido y la concentración de CO2 alcanzó un valor próximo a su nivel preindustrial.las estaciones estaban más marcadas que hoy en día.

11.-Perforaciones en Groenlandia ponen de manifiesto oscilaciones en el clima con una duración entre 500 a 2.000 años, con calentamientos de hasta 10º en unas pocas decenas de años.